Los términos de creatividad e innovación se utilizan constantemente en las empresas en busca de avances que les hagan diferenciarse de sus competidores en el mercado. De hecho, se trata de dos aptitudes profesionales cada vez más valoradas por las empresas al estudiar las principales fortalezas de sus futuros empleados.

Y aunque estos dos términos están muy estrechamente relacionados, en realidad tienen significados diferentes. ¿En qué se diferencian entonces creatividad e innovación? Sigue leyendo y todas tus dudas quedarán rápidamente despejadas.

¿QUÉ ES LA CREATIVIDAD?

Expresado de la forma más sencilla posible, la creatividad es la capacidad de una persona para generar nuevas ideas, alternativas o soluciones a un problema de una manera diferente a todas las opciones imaginadas con anterioridad. Es decir, somos creativos cuando abandonamos la comodidad de lo que ya conocemos para tratar de encontrar un nuevo enfoque que nos ayude a resolver un problema dado.

Ser creativos implica no tener miedo a pensar de forma diferente, dando espacio a ideas descabelladas si es el caso. Y no pasa nada por salirse del manual en el proceso creativo: la creatividad tiene un alto componente de prueba y error, de locura y de ingenio aplicados al pensar. Este es el único camino para dar con soluciones originales que nadie antes se atrevió a contemplar.

La creatividad puede darse en cualquier ámbito de la vida, no solo en el entorno de la empresa. Por ejemplo, podemos encontrar una forma creativa de dar un nuevo uso a una vieja maleta convirtiéndola en una confortable cama para nuestro querido gatito: nuestra capacidad de ver más allá de lo obvio nos ha permitido concebir una alternativa a tener que deshacernos de esa maleta que en tantos viajes nos acompañó, al tiempo que conseguimos darle a nuestro gatito un lecho en el que disfrutará de lo lindo pasando las horas tumbado. 

Se trata, por lo tanto, de un proceso al alcance de cualquier persona, que es difícil de cuantificar y cuya base es principalmente imaginativa.

¿QUÉ ENTENDEMOS POR INNOVACIÓN?

Por su parte, la innovación tiene un significado distinto al de la creatividad. Innovar consiste en el acto de aplicar nuevas ideas para potenciar el valor de una empresa, de una organización o de la sociedad de forma general. Seguro que también puedes innovar a la hora de buscar nuevas comodidades para tu querido amigo felino, pero no es la acepción que generalmente asociamos a los procesos de innovación

Al contrario que la creatividad, la innovación sí que es más fácilmente medible, ya que consiste en introducir cambios en sistemas que son relativamente estables. Por ejemplo, un fabricante de artículos para la natación estará innovando al aplicar sus recursos creativos en el diseño de una solución a una determinada necesidad de los nadadores. Este sería el caso al desarrollar un nuevo tubo de respiración frontal, perfecto para nadar sin tener que girar la cabeza para tomar cada bocanada de oxígeno.

La innovación se centra no tanto en concebir nuevas ideas, sino en ponerlas en práctica superando cada uno de los desafíos de lanzar algo novedoso (desconfianza de los usuarios, reparos a la hora de adoptar nuevas soluciones, etc.). Si tienes en mente emprender con un nuevo proyecto de negocio, la innovación resultará un factor esencial para alcanzar el éxito.

DIFERENCIAS ENTRE CREATIVIDAD E INNOVACIÓN

Una vez explicado cada uno de los conceptos –creatividad e innovación– resultará más fácil extraer sus principales diferencias:

  1. Mientras que la creatividad va a poner el foco sobre el trabajo de alumbrar nuevas ideas o conceptos, la innovación se va a encargar de la ejecución de dichas ideas para generar algún tipo de valor.
  2. Si la creatividad es un proceso imaginativo, la innovación es un proceso productivo. En el primero no hay más límites que el de la propia capacidad de generar nuevas ideas, mientras que en el segundo hay límites de presupuesto, de tecnologías, etc.
  3. La creatividad no siempre tiene la finalidad de impulsar el crecimiento de una organización, algo que sí es propio de la innovación. Sin embargo, la innovación no puede tener lugar sin personas creativas poniendo a funcionar sus dotes de creatividad.
  4. En el ámbito empresarial, la creatividad está relacionada con la generación de ideas originales. Por su lado, la innovación llegará al afrontar el reto de introducir algo nuevo en el mercado.

Juntandolo todo, si la creatividad es el primer paso para identificar una nueva forma de hacer las cosas, la innovación es la acción de llevarlo a la práctica real. Si bien ambos son necesarios en el ámbito de los negocios, solamente el segundo concepto se traducirá en la creación de valor y en la obtención de beneficios.