En los últimos tiempos, especialmente a raíz de la pandemia de la COVID, hemos escuchado hablar del ARN. Pero ¿sabemos qué es exactamente el ARN, qué función tiene en nuestro organismo y, sobre todo, qué usos y aplicaciones revolucionarias está teniendo en medicina? Vamos a arrojar algo de luz al respecto.

¿Qué es el ARN?

ARN son las siglas de ácido ribonucleico. Es uno de los dos tipos de ácidos nucleicos principales, que son el ARN y el ADN (ácido desoxirribonucleico).

De una manera muy simplificada, los ácidos nucleicos son polímeros (sustancias formadas por grandes moléculas) que forman largas cadenas de nucleótidos. Estructuralmente, el ARN y el ADN se parecen mucho, pero entre ambos hay diferencias. La principal, y la que necesitamos conocer para el asunto que nos ocupa, es que el ADN lleva la información genética del individuo y el ARN, la transporta.

Tipos de ADN

La célula utiliza el ARN para distintas tareas, lo que nos lleva a conocer los distintos tipos de ARN que existen.

ARN mensajero (o ARNm). Este es el ARN del que más hemos oído hablar en los últimos años, ya que muchas vacunas contra la covid están basadas en él. El ARNm lleva la información del ADN en el núcleo de la célula hasta el lugar en el que se sintetizan las proteínas de la célula fuera del núcleo, llamado ribosoma. El nombre de “mensajero” no puede ser más acertado.

ARN de transferencia (o ARNt). Se trata de una pequeña molécula de ARN cuya función es suministrar al ribosoma los aminoácidos necesarios para que este  fabrique proteínas.

ARN ribosómico (o ARNr). Forma parte de los ribosomas y se combina con proteínas para crearlos.

Usos del ARN en el área de la medicina

Son muchos los usos del ARN en la medicina, que constantemente evoluciona y crea nuevas terapias. Estas son algunas de las que ya están implantadas o van a estarlo en breve:

Vacunas

Ya vimos el ejemplo de las vacunas anti-COVID basadas en ARNm. Lo que hace, en esencia, la vacuna, es dar instrucciones al cuerpo humano para producir la sustancia de la que están formadas las espículas (los pinchitos, para entendernos) del virus SARS-CoV-2, la exponen y, al detectar al virus, en el caso de contagiarnos, lo reconocen como un agente extraño y luchan contra él.

Enfermedades raras

Uno de los principales problemas de las enfermedades raras es que su escasa prevalencia complica la investigación, ya que el coste es muy alto para los beneficios que comporta en la salud pública. Sin embargo, el ARNm también puede mejorar o revertir estos trastornos. Del mismo modo que en las vacunas se enseña a las células a producir una determinada sustancia para luchar contra un virus, se les puede mostrar cómo modificar la expresión de los genes del individuo.

Inmunoterapia

La inmunoterapia es la terapia hacia la que camina la mayor parte de los tipos de cáncer y que, seguramente, terminará desterrando en gran parte a la quimioterapia; al menos, en los casos en los que los pacientes no mejoren con ella. Algunas inmunoterapias están basadas en ARN, como la que se aplicará a ciertos cánceres hematológicos y que se anunció recientemente.

Medicina personalizada: biomarcadores y prevención

Hay determinadas expresiones de nuestros genes que nos predisponen en mayor o menor medida a unas u otras enfermedades. Conocer esos factores de riesgo expresados en nuestro genoma (lo que se conoce como biomarcadores genéticos) permitirá, unido a la gestión de datos, no solo crear una medicina personalizada que será mucho más efectiva, sino también prevenir una serie de dolencias o tratarlas precozmente.