En un contexto de crisis mundial, la economía es el primer gran problema. No nos referimos a grandes conceptos macroeconómicos, sino al hecho innegable de que los precios se disparan. Luz, agua, gas, pero también la cesta de la compra, el material escolar, la ropa… ¿Cómo ahorrar?, ¿cómo afrontar este incremento en nuestros gastos sin que el bolsillo sufra demasiado? Vamos a ver algunos consejos.
Cómo ahorrar en la cesta de la compra
- Haz una planificación. Crea un menú el fin de semana, comprueba qué necesitas comprar y ve con una lista de la compra al supermercado. Un truco: ve con el estómago lleno para evitar adquirir productos que no necesitas, pero te tientan.
- Aprovecha las ofertas. En los lineales, a menudo hay ofertas de 2×1, 3×2… Comprueba si compensa y decántate por esos productos.
- Cocina de manera sostenible. Para ahorrar energía, si vas a encender el horno aprovecha para cocinar todo lo que puedas a la vez en lugar de solo una cosa. O haz grandes cantidades: si vas a asar verdura, haz varias raciones, divídelas en porciones y conserva en el congelador para usar en otro momento.
- Congela… y algo más. El congelador es un lugar estupendo para almacenar comida, pero hay más formas de que la comida aguante: ¿qué tal poner la verdura que has cocinado en conserva? La fruta que se está pasando puedes deshidratarla en el horno o hacer mermelada.
- Utiliza el método FIFO (First In, First Out). Lo primero que entra en la nevera (o la despensa) es lo primero que sale. Así, además, evitarás tirar comida.
- Practica la cocina de aprovechamiento. Hacer croquetas con carne que ha sobrado o sopa con el caldo de un guiso de legumbres es un clásico de generaciones anteriores, además de altamente ecológico.
- Compra productos de temporada. Cuando adquieres fruta o verdura fuera de estación, esta es más escasa, viene de lejos y, por tanto, es más cara. Si te ciñes a los productos de temporada (preferiblemente de kilómetro cero) tendrás una mayor oferta y mejores precios.
Cómo ahorrar en luz, agua y gas
- Aprovecha la luz del día al máximo. En otoño e invierno los días son más cortos; busca bombillas de bajo consumo para gastar menos.
- Purga regularmente los radiadores para asegurar su máxima eficacia, o limpia los filtros de la bomba de frío-calor si es tu opción energética en casa.
- Sella las ventanas y las juntas de las puertas con burletes para evitar que se escape aire cuando pongas la calefacción.
- Nunca dejes un grifo abierto más de lo imprescindible, y cierra el de la ducha cuando te estés enjabonando para evitar tirar agua.
Hay montones de pequeños detalles para ahorrar energía en casa que harán que, a final de mes, tus facturas sean sensiblemente más bajas.
Cómo ahorrar en ropa
- Evita las compras compulsivas producto de un mal (o muy buen) día. Mira escaparates, apunta lo que te gusta y, al llegar a casa, decide si alguna de esas prendas te hace realmente falta.
- No adquieras una prenda que te está pequeña con la promesa de que en un par de meses te va a valer.
- Aprovecha las rebajas. Si comprarte ese pantalón o esa camisa no es urgente, lo ideal es pasear por las tiendas en época de rebajas.
Recicla prendas. A menudo tenemos guardadas en el fondo del armario prendas que dejamos de ponernos y que han vuelto a ponerse de moda o que lo estarían con algún pequeño toque. Si no te convence, dónala a lugares como Cáritas o Humana para que le den una segunda vida.