Entre los muchos fenómenos que está trayendo el cambio climático, uno de los más llamativos es el deshielo del Ártico. Hoy en día se sigue investigando sobre sus causas y consecuencias aunque algunas ya se conocen y están sucediendo en la actualidad.

¿Por qué está sucediendo el deshielo del Ártico?

Las causas del deshielo del Ártico se remontan al siglo XIX, en plena revolución industrial. A partir de entonces, han aumentado exponencialmente las emisiones de gases de efecto invernadero. Entre ellas, las de dióxido de carbono (CO2), el mismo que ahora estamos intentando contener para mejorar la sostenibilidad del planeta.

La masiva quema de carbón desde la mencionada revolución industrial ha tenido, además, otra consecuencia: la deforestación, ya que parte de ese carbón es de origen vegetal que ha dado lugar a la tormenta perfecta. Os contamos las consecuencias que ha traído consigo:

Consecuencias del deshielo del Ártico

Aumento del nivel del mar

Se calcula, según datos que aporta Greenpeace, que el nivel del mar ha aumentado 19 centímetros en unos 120 años y que el grosor del hielo ártico ha disminuido un 40% en solo 30 años. El nivel del mar sigue incrementándose, por lo que, si no paramos esta catástrofe, áreas terrestres, que hoy están junto al mar, terminarán sumergiéndose en él. Nueva York, Tokio o Estambul son algunas de las muchas ciudades que pueden desaparecer total o parcialmente en el próximo siglo.

Fenómenos climatológicos extremos

Ya estamos empezando a advertir fenómenos climatológicos extremos. Los expertos indican que el deshielo del Ártico traerá como consecuencia un cambio de patrón. La corriente negacionista se ampara en que no puede haber tal calentamiento global si hay episodios de frío extremo en invierno, pero es que los efectos varían según la zona geográfica. Puede haber más tormentas o que sean más intensas, al igual que los ciclones y anticiclones, los cuales hacen que cambien sus estructuras, haya más olas de calor o más inundaciones, etcétera.

Cambio de ciclos naturales en los distintos hábitats

El deshielo del Ártico provoca no solo un aumento del nivel del mar, sino también de la temperatura terrestre y marítima. A partir de un incremento de 2 ºC en la temperatura global, los efectos del cambio climático comienzan a ser patentes, según Greenpeace. Esto hará que, por ejemplo, los hábitats en los que se mueven muchas especies marinas y también terrestres transformen sus ciclos naturales, con consecuencias imprevisibles.

Desaparición de especies

La desaparición de especies debido a este calentamiento que provoca el deshielo del Ártico es otra de sus fatídicas consecuencias. Especies animales como el oso polar, la foca monje, el pingüino, el koala…, corren peligro de extinción. En el ámbito de la flora, se habla desde el CSIC de una desaparición de hasta el 25% de las variedades conocidas.

¿Pandemias?

Se calcula que, para 2100, se pueden perder hasta 2/3 del permafrost (suelo permanentemente helado de las zonas glaciares). Uno de los temores es que ese deshielo libere virus desconocidos o bacterias resistentes a los antibióticos que desencadenen una nueva pandemia.

¿Cómo frenar el deshielo del Ártico?

Toda ayuda es buena. Y sí, nosotros también podemos contribuir como ciudadanos a frenarlo. Pequeños gestos (desde consumir menos plástico hasta reciclar o evitar coger el coche siempre que podamos) ayudan. Por parte de los gobiernos, la solución pasa por cumplir los objetivos de desarrollo sostenible. Aún podemos evitar lo peor.