El atragantamiento es uno de los miedos permanentes en todo padre y madre, sobre todo en los primeros años de vida. Desafortunadamente, no siempre saben cómo actuar correctamente para ponerle remedio al problema sin que este vaya a peor. Atragantamiento en niños y bebés: ¿cómo actuar si nos sucede?

Como siempre, la prevención es la primera estrategia de ataque para evitar sustos con atragantamientos en el caso de bebés y niños pequeños, de todas formas deberemos estar preparados para actuar de la forma correcta.

Apoyándonos en las recomendaciones en primeros auxilios de la Cruz Roja, en este artículo recopilamos las pautas de comportamiento a seguir en el caso de un atragantamiento en niños pequeños y bebés.

ATRAGANTAMIENTOS: UN PROBLEMA FRECUENTE EN MAYORES Y PEQUEÑOS

Los atragantamientos son mucho más frecuentes de lo que pudiéramos imaginar en un principio. Si acudimos a los datos publicados por el INE, seguramente nos sorprenda saber que la asfixia por atragantamiento es la tercera causa de fallecimiento no natural en España, por delante de los accidentes de tráfico.

De hecho, esta cifra supera de largo las dos mil personas que pierden la vida cada año por no ser capaces de expulsar un trozo de comida u otro objeto que les impide respirar. ¿Quiénes son las personas más expuestas a los atragantamientos? Si bien en primer lugar se sitúan las personas mayores de sesenta y cinco años, los menores de edad son el segundo grupo.

En el caso particular de los bebés y niños de corta edad, casi cualquier objeto cotidiano de pequeño tamaño puede ser el causante de un atragantamiento.

La primera barrera para evitar un atragantamiento en nuestro bebé o niño pequeño es la prevención. Para ello, debemos estar siempre atentos para evitar que los menores de tres años jueguen con objetos que puedan causar un atragantamiento

Estas son las pautas que nos facilita la Cruz Roja en su guía de primeros auxilios:

  • No dejar objetos de menos de tres centímetros de diámetro cerca de los bebés. Como referencia, evitaremos cualquier objeto que pueda pasar por el tubo de un rollo de papel higiénico.
  • Enseñarles a comer tranquilamente, a trocear y a masticar los alimentos antes de tragarlos. 
  • Evitar que los niños corran, griten, canten o jueguen mientras comen.
  • No dejar que los menores de tres años coman frutos secos si estos no están muy troceados.

¿CÓMO ACTUAR EN CASO DE ATRAGANTAMIENTO DE UN BEBÉ O NIÑO?

Siguiendo con las recomendaciones de la Cruz Roja en casos de atragantamiento en bebés y niños pequeños, los pasos que deberemos seguir variarán en función de la edad del pequeño. 

En primer lugar, deberemos pedir a alguien que llame al 112 en el momento de producirse el atragantamiento, o si estamos solos, hacerlos nosotros mismos. Ten en cuenta que un atragantamiento puede solucionarse en unos segundos o complicarse poniendo en riesgo la vida de la persona afectada, por lo que la presencia de un equipo de emergencias puede resultar crucial.

Después, procederemos con las maniobras para la expulsión del objeto o alimento que esté causando el atragantamiento.

Cómo actuar en el atragantamiento de un bebé:

  • Lo colocaremos boca abajo sobre nuestras rodillas, con la cabeza ligeramente más baja que el resto del cuerpo.
  • Le daremos cinco palmadas contundentes en la espalda, a la altura de los hombros (es decir, entre los omoplatos).
  • Si el bebé no expulsa el cuerpo extraño, le daremos la vuelta y para comprimir cinco veces seguidas en el centro de su tórax.
  • Alternamos las palmadas en la espalda con las compresiones en el tórax hasta expulsar el cuerpo extraño o hasta que llegue la ayuda médica.

En el caso de los niños de más de un año:

  • Le daremos cinco palmadas contundentes en la espalda, a la altura de los hombros (entre los omoplatos).
  • Si no sale el cuerpo extraño, le rodearemos con los brazos desde la espalda, colocando las manos cerradas a la altura de la boca del estómago. En esa posición, realizaremos cinco compresiones fuertes y rápidas hacia arriba y hacia nuestro propio cuerpo.
  • Alternamos las palmadas en la espalda con las compresiones abdominales hasta expulsar el cuerpo extraño o hasta que llegue la ayuda médica.

Si aún así quieres estar aún más preparado para resolver con éxito un caso de atragantamiento en tu bebé o niño pequeño, siempre es recomendable hacer un curso presencial de primeros auxilios como los impartidos por la Cruz Roja.