La protección de las personas es fundamental en la sociedad actual. Se trata de un aspecto clave que identifica a las sociedades modernas. En España hay diferentes organismos, tanto públicos como privados, encargados de este aspecto.

La colaboración entre los organismos públicos y las entidades privadas resulta necesaria para una protección efectiva de la población en sus diferentes ámbitos. En este sentido, existen numerosos profesionales tanto de los Cuerpos Públicos del Estado como procedentes del sector privado, que velan por la seguridad de diferentes colectivos y la sociedad en su conjunto.

Protección de personas de la Guardia Civil

Desde su creación en 1844, una de las misiones de la Guardia Civil ha sido velar por la seguridad pública. Esto incluye la protección de los ciudadanos, así como la de sus bienes y derechos.

Dentro del Cuerpo existen diferentes unidades que protegen a personalidades del ámbito político e institucional, como la Familia Real o la Presidencia del Gobierno. Sin embargo, cualquier persona que se sienta desprotegida o que se vea en peligro puede solicitar su ayuda, ya que su principal labor, resumida en el artículo 104 de la Constitución, es garantizar la seguridad ciudadana.

La vigilancia del tráfico, el rescate y ayuda en la montaña, o proteger a las personas en actos delictivos, de abuso o vandálicos son algunas de las situaciones en las que la sociedad se ve beneficiada de la actuación de este Cuerpo de Seguridad, que se ha convertido en un referente de cercanía para el ciudadano.

Protección de personas de la Policía Nacional

Entre los servicios que tiene que realizar la Policía Nacional se encuentran los orientados a la protección de las personas. En 1986 se promulgó la Ley Orgánica de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, por la que se crea el Cuerpo Nacional de Policía, como resultado de la unión del Cuerpo Superior de Policía y el Cuerpo de Policía Nacional, que se homogenizan en un mismo colectivo.

Hoy, la Unidad Central de Protección asume la organización y ejecución de la protección de altas personalidades nacionales y extranjeras. De esta Unidad dependen la Brigada Central de Escoltas y la Brigada Central de Protecciones.

Vigilancia y seguridad privada

Dentro del sector privado, los vigilantes de seguridad desempeñan diferentes funciones relacionadas con la protección de las personas, entre ellas las siguientes:

  • Protección de las personas en establecimientos, lugares y eventos, tanto privados como públicos.
  • Controles de identidad en el acceso o interior de inmuebles. No podrán retener la documentación personal, pero sí impedir el acceso a los mismos ante la negativa de exhibir la identificación o no permitir el control de los objetos personales o del vehículo.
  • Detección y puesta a disposición de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad competentes de los delincuentes y pruebas de los delitos.
  • Prestación de servicios de verificación personal y respuesta de las señales de alarma que se produzcan en las centrales receptoras de alarmas.
  • Traslado a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad de las señales de alarmas relativas a la seguridad y protección de personas y bienes.

Las personas que quieran trabajar como vigilantes de seguridad, escolta privados, servicios de protección personal y en labores relacionadas con la seguridad de pasajeros en aeropuertos, tendrán que habilitarse profesionalmente tras cursar el certificado de profesionalidad en vigilancia, seguridad privada y protección de personas.

La tecnología al servicio de la seguridad

Cada vez hay más personas que confían en la seguridad privada para sentirse seguras debido a la calidad del servicio, la cualificación y el grado de experiencia de los profesionales del sector.

Las empresas privadas, por su parte, se esfuerzan constantemente en ofrecer al ciudadano soluciones innovadoras que permitan, apoyándose en la colaboración con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, dar una protección integral al ciudadano. Para ello, estas técnicas de protección de personas juegan con la tecnología como principal aliado.

1. Soluciones para personas mayores

Las personas mayores que viven solas son uno de los colectivos más vulnerables de la población y, por tanto, exigen una mayor protección. Muchas de estas personas de cierta edad viven solas como consecuencia del incremento de la esperanza de vida, los avances de la medicina y su necesidad de independencia.

Pensando en proteger a las personas mayores que viven solas, Securitas Direct ha desarrollado una innovadora tecnología que les protege tanto en el propio domicilio, como cuando salen de éste. Para el interior del domicilio, y dentro del programa Protección Senior, existen dispositivos de emergencia en forma de pulsador o reloj que posibilita a los mayores solicitar ayuda en caso necesario. Asimismo, las alarmas de seguridad protegen a todas las personas que se encuentran en el interior de la vivienda, dando aviso incluso si se produce un incendio.

2. Protección fuera del domicilio

Por su parte, el sistema Guardián de Securitas Direct protege a las personas cuando salen de su domicilio. El objetivo es lograr una completa seguridad combinando la tecnología con la experiencia de un equipo de profesionales que evalúan cada caso.

Funciona a través del teléfono móvil y tiene un botón de SOS que la persona puede activar si tiene un incidente o necesita ayuda. Al pulsarlo se envía una alerta al equipo de técnicos, que activarán los protocolos de actuación en caso necesario. Además, el modo “Acompáñame” está pensado para que la persona pueda sentirse segura en sus desplazamientos. Para utilizarlo solo hay que señalar la hora estimada de llegada. Si no se cumple, los especialistas podrán en marcha el protocolo de seguridad.

3. Alarmas para viviendas y negocios

Las alarmas de Securitas Direct, pensadas para domicilios y negocios, también están dirigidas a proteger a las personas que se encuentran en su interior. Cualquier alerta es atendida de forma inmediata por un experto en seguridad que establece los protocolos más adecuados.

En la protección de casa, una de las ventajas es que las instalaciones no requieren de cables ni obras, y con el mínimo esfuerzo convierten cualquier vivienda en un espacio seguro para las personas. En cuanto a la protección de negocios, una de las tecnologías que más se está implantando es el sistema ZeroVision, que genera una situación de cero visibilidad en la estancia, impidiendo la visión al ladrón para que negocio, y las personas que están dentro, quede protegido hasta la llegada de la Policía.

La coordinación de los organismos públicos y privados es fundamental para proteger a las personas. La colaboración entre las Fuerzas de Seguridad del Estado y el sector de la vigilancia y la seguridad privada, resultan clave para que la sociedad se sienta protegida en cualquier ambiente y bajo cualquier situación.