Con los datos que arroja el informe “La seguridad en hogares y negocios” del Observatorio Securitas Direct, vamos a dibujar un perfil sobre este tema, clave en el bienestar de todos nosotros.
Índice de la tranquilidad: ¿qué es y conforme a qué valores se mide?
El índice de la tranquilidad, elaborado por Kantar para Securitas Direct / Verisure,se calcula gracias a un estudio que toma en cuenta la relevancia que tiene para las personas de distintos países sufrir una intrusión y las posibilidades de que dicha intrusión ocurra.
Se establecen, una vez extraído dicho índice, niveles que van de 0 a 200, donde 0 es ninguna preocupación y 200 sería la máxima preocupación.
La percepción de seguridad por países
Pero ¿cuánto más o menos nos preocupa la seguridad en el último año con respecto al anterior? Utilizando el mencionado índice de la tranquilidad como medidor, se observa que Europa es un área en el que la percepción de la seguridad es alta. Los países nórdicos (Finlandia, Suecia, Noruega) son, junto a Alemania y Reino Unido, donde menos preocupación se percibe. España ocupa una zona media en esta percepción.
Chile, Argentina y Perú son los países de Latam en los que la preocupación por la seguridad dentro del hogar es mayor.
Las principales preocupaciones en materia de seguridad
Llegados a este punto sí se observan grandes diferencias entre Europa (incluyendo España) y Latinoamérica. Al margen de los robos dentro de los hogares, en nuestro continente preocupan más los accidentes domésticos (fugas, incendios, etcétera); sin embargo, en Latinoamérica inquietan los robos fuera de casa y los asaltos a domicilios, algo poco relevante en Europa.
Factores más relevantes en Europa y Latam
Basándonos en los datos que ofrece el Observatorio de Securitas Direct, hay tres factores que acaparan las principales preocupaciones en estas regiones.
Las ausencias prolongadas
Esta preocupación está íntimamente ligada a las vacaciones, en especial a las de verano. Por lo general, julio y agosto son dos meses en los que tanto en España como en el resto de Europa es tradición ausentarse para tomarse unas vacaciones.
La exposición a robos
Parece razonable pensar que si se ha sufrido un robo en casa o se conoce un caso muy cercano (tanto familias como vecinos, por la cercanía a nuestro hogar), se piense en implementar medidas de seguridad que reduzcan esta preocupación. Lo más habitual es instalar un sistema de alarmas.
El factor verano
Además de las ausencias prolongadas de las que hablábamos en el primero de estos tres puntos, en verano salimos más de casa y hacemos más escapadas. Aunque sea por un breve espacio de tiempo (un día al aire libre, un fin de semana, un puente), la sensación de que dejamos la casa sola más tiempo hace que nos preocupemos más de posibles robos o intrusiones.